En tiempos de crisis, muchas empresas reducen costos en su activo más valioso: las personas. Este artículo muestra por qué invertir en el capital humano es la estrategia más inteligente y rentable para superar los desafíos del mercado y salir fortalecidos.
Cambiar la forma de pensar de las personas no es manipulación: es evolución. En este artículo exploramos cómo identificar, acompañar y transformar los patrones mentales que frenan la productividad y la cultura organizacional. Una guía práctica —y algo poética— para líderes que se animan a mandar el cerebro a la tintorería.